Cada viaje debería ser único y eso solo se consigue con buena compañía, visitar lugares diferentes cada vez y alojarse en sitios con encanto. Los hoteles suelen ser todos parecidos, tallados casi del mismo patrón y normalmente, caros.

En los últimos años hay un sistema de alquiler de apartamentos que está revolucionando el mercado del turismo en todo el mundo, para bien y para mal, está cambiando la forma en la que viajamos. Es Airbnb.

Llevo dos años usando Airbnb en mis viajes y en total han sido en unas 30 ocasiones, en casas y habitaciones, de 16 ciudades en 6 países diferentes. Os voy a explicar cómo usarlo y sacarle el mayor partido posible.

¿Qué es Airbnb?

Es una plataforma que permite a particulares ofrecer alojamiento a viajeros en su casas y pisos. En ocasiones pueden ofrecer una habitación solamente o la propiedad entera.

Airbnb pone en contacto al anfitrión (la persona que pone su apartamento en alquiler) y el huésped (tú).

¿Cómo funciona?

Personas que quieran hospedar a viajeros apuntan sus pisos, habitaciones o casas en la web, y cuando un usuario quiere hacer la reserva tiene dos formas: puede enviar un mensaje al anfitrión para preguntar por su disponibilidad o si el propietario lo tiene activado, puedes seleccionar «reserva inmediata» y se hace la reserva directamente sin que te apruebe el dueño antes o tengas que mandar un mensaje preguntando.

Después de hacer la reserva, el anfitrión te comunicará como se hace la entrega de llaves, horarios, cómo llegar, etc.

Tipos de alojamiento

Lo que normalmente se ofertan son tres tipos de alojamientos:

• Propiedad / casa entera: Como estar en tu casa. El dueño te dará las llaves y dispondrás de todo el espacio para ti, sin nadie más.
• Habitación privada: Parecido a un hotel, dispondrás de una habitación completa para ti solo, en una casa con el dueño de la casa (normalmente). El resto de espacios se suelen compartir: comedor, cocina, etc. Suelen ofrecer desayuno incluido en la mayoría de este tipo.
• Habitación compartida: Parecido a un albergue, es como alquilar una cama en una habitación donde dormirá más gente. Ideal para viajes cortos y con poco presupuesto.

Rango de precios

Suele variar dependiendo de las fechas, ciudades, etc. Pero podemos decir que las propiedades suelen ser entre un 30% o 50% más baratas que los hoteles de la zona.

El precio medio en hoteles de Londres es de 150€/noche (según el índice de Trivago). Aquí un ejemplo de búsqueda de habitación privada para 7 días en septiembre para 2 personas con Airbnb (precio/noche):

¿Cómo hago la reserva?

Una vez elegido el piso o habitación, verás los datos de la reserva (fechas y huéspedes) con el cálculo del precio (más la tarifa que cobra Airbnb). Si aparece «Solicitar una reserva» se pre-reservará (valga la redundancia) la habitación / casa hasta que el propietario dé la autorización.

Los huéspedes suelen tardar poco en aceptar la reserva. Hay gente que trabaja y hasta que reciben la notificación puede pasar un día. Nunca he esperado más de 48h en tener una respuesta.

La otra opción, más popular cada vez en Airbnb, son las RESERVAS INMEDIATAS, marcadas con un icono de un rayo (⚡️). Este tipo de propiedades pueden reservarse con un solo clic y no requiere aprobación posterior del dueño. Muchas son habitaciones o casas destinadas al turismo regular, por lo que es más fácil y rápido. Como cualquier web de hoteles.

Ventajas y posibles pegas al usar Airbnb

Como todos los sistema de economía colaborativa, tiene sus pros y contras. Estos son los que creo yo que hay que remarcar.

Puntos positivos:

• Precios muy económicos. Tanto para propiedades completas como habitaciones privadas, si los comparamos con la alternativas en hoteles.
• Variedad. Como son casa de personas y cada uno es de una forma, puedes encontrar propiedades clásicas, rústicas, modernas, antiguas, etc.
• Servicios que no ofrecen los hoteles. En Airbnb puedes encontrar pisos, habitaciones, cabañas, casas con piscina privada, tiendas de campaña, etc. A parte de eso, algunos anfitriones permiten que viajes con perros, niños, plazas de parking, apto para fumadores, jacuzzis y muchas otras cosas.
• Trato personal. Al tratar con personas dueñas de dónde vas a dormir, te tratan con proximidad, recomiendan cosas de la ciudad y ayudan en todo. En hoteles el trato suele ser más frío.
• Garantía: como airbnb hace de intermediario, siempre intentará que la comunicaciones con el anfitrión sea la adecuada. Si no fuera el caso, ellos les contactarían. En problemas más graves de cancelaciones repentinas o similares, airbnb te ayudaría a buscarte otro alojamiento. Por lo que estás siempre cubierto ellos.

Puntos negativos:

• A mi no me ha pasado, pero podría ser que algunas fotos pudieran no reflejar con exactitud el estado de la propiedad.
• Cada dueño es un mundo y tiene su vida, por lo que tu hora de llegada podrá no ajustarse a los horarios de entrega de llaves del anfitrión. Eso te puede hacer perder tiempo si no lo habéis concretado antes por mensaje.
• Depende del tipo de reserva y condiciones, tal vez no tengas acceso a las zonas comunes (tipo: cocina).
• Podrías encontrarte con propietarios menos simpáticos o resolutivos. Aunque siempre puedes ponerle una mala reseña después.
• Si pasas varios días, no tienes servicio de limpieza de habitaciones como en los hoteles.

Mi experiencia

Normalmente intento alquilar pisos enteros a los sitios que voy con Airbnb. Simplemente me gusta más tener toda la casa, poder ir al supermercado y llegar la nevera, hacer vida a mi aire. Sin embargo, también me he hospedado en habitaciones privadas en casas compartidas y mi experiencia es positiva. Los huéspedes suelen ser muy abiertos, te recomiendan restaurantes y lugares de la ciudad. En algunas reserva también te incluyen el desayuno, aunque eso depende del dueño de la casa y de lo que quiera ofrecer.

Al ser una plataforma donde los viajeros puntúan y valoran públicamente el lugar, al igual que los propietarios comentan a la gente que ha reservado sus propiedades, todo el mundo suele ser simpático y la comunicación suele ser bastante abierta y efectiva.

Los que viajamos, quedándonos en la casa de otra personas, sabemos que eso no es un hotel que alguien vive allí y por lo tanto que hay que cuidarlo. Ellos en cambio, como no pueden censurar las críticas y comentarios negativos en Airbnb, siempre harán lo que esté en su mano para que estés a gusto y les puntúes bien. Ejemplos que me han pasado a mi: esperarte para darte las llaves, dejarte comida o plaza de parking más tiempo para tu coche, permitir que te vayas tarde de la propiedad porque no hay nadie al día siguiente, etc.

Hablando solo del servicio y la gente con la que he interactuado con airbnb, solo puedo hacer que recomendarlo.

Consejos de experto

Para que todo vaya sobre ruedas, sigue estas recomendaciones siempre:

Busca anfitriones (Hosts) con muchas evaluaciones

Todos los usuarios son puntuados y reciben evaluaciones, por lo que intenta buscar sitios con muchas fotos y donde el dueño tenga la nota más alta posible. Si mucha gente le recomienda, por algo será!

Si dudas, lee algunas de la última evaluaciones. Te darán una idea de como es el propietario y la experiencia de otros usuarios:

Regístrate y añade la máxima información sobre ti

Cuando buscas un alojamiento, tendrás en cuenta las fotos de la propiedad, la puntuaciones de los usuarios, etc. Pues los huéspedes hacen lo mismo contigo. Así que añade una buena foto de perfil, nombre real completo, profesión, una descripción de tus gustos que quede simpático y foto de tu pasaporte / DNI o carnet de conducir. También puede verificar tu identidad vinculando la cuenta a tu facebook, linkedin, etc.

Conforme vayas viajando irás ganando evaluaciones y será menos probable que un propietario no te acepte una reserva por falta de información. Recuerda que eres un invitado en su casa y no tiene por qué fiarse de ti.

Busca con antelación

Se puede reservar con un día de antelación, pero los buenos apartamentos y habitaciones suelen alquilarse con mucho tiempo por delante. Así  que no esperes al último momento.

Lee las condiciones y descripción antes de reservar

A veces nos centramos sólo en mirar las fotos, zona y precio. No obstante, es muy importante que leas la descripción del anfitrión sobre sus condiciones. En ellas indicará si tienes acceso a todas las zonas comunes, transporte, horarios de llegada y saluda, si se permiten visitas, costes adiciones, etc.

Tantea a varios anfitriones a la vez

Si no vas a usar la opción de «reserva inmediata» y tienes que «solicitar reserva» en las propiedades que te interesan, en vez de «solicitar», envía un mensaje privado antes a varios usuarios preguntando sobre la disponibilidad, condiciones, etc.

De este modo verás con que velocidad contestan los mensajes, y además, podrás confirmar la propiedad que te interese ya que que al selecciones «solicitar reserva» ya no puedes seleccionar otra para las mismas fechas y dependes de que el anfitrión conteste rápido y te la acepte. Envía un mensaje e irás más directo.

Prepara tu carta de presentación

Cuando haces la reserva tienes que enviar un mensaje al anfitrión, por lo que te recomiendo que sepas qué escribir (castellano o inglés) para que le caigas simpático, explicado en pocas líneas: por qué te gusta la propiedad, con quién vas, preguntando por la zona, etc.

El truco es mostrar interés y que no piense que es solo un alojamiento más, como un hotel cualquiera y que te da igual.

Descuento de 35€ gratis para tu primera reserva:

Si quieres probar airbnb en tu próximo viaje y ahorrar todavía más dinero, regístrate usando este enlace:

www.airbnb.es/descuento-BRISTOLEÑOS

El saldo se descontará del coste de tu próxima reserva, que tenga un precio mayor a 70€ o sea superior a dos noches de alojamiento.